Declaración de Fe

 Declaración de Fe

La Biblia es nuestra toda suficiente regla de fe y conducta. No decimos que esta declaración contenga toda la enseñanza de la Biblia, solo que cubre nuestras necesidades presentes en cuanto a doctrinas fundamentales.

1. Las Escrituras Inspiradas
La Biblia es la Inspirada Palabra de Dios, una Revelación de Dios al Hombre; regla infalible de fe y conducta; es superior a la conciencia y a la razón pero no contraria a la razón. (2 Timoteo 3: 15, 16)
2. El Único y Verdadero Dios
El Único y verdadero Dios se ha revelado a Sí mismo con el Eterno existente por sí mismo, revelado por sí mismo “Yo Soy”. Además se ha revelado como reuniendo los principios de parentescos y asociaciones a saber: como Padre, Hijo y Espíritu Santo. (Deuteronomio 6:4 – Mateo 28:19)
3. El Hombre, su Caída y Redención
El hombre fue creado bueno y justo, por cuanto Dios dijo: “Hagamos al Hombre a nuestra imagen y semejanza”. Mas el hombre cayó por transgresión voluntaria y su única esperanza de redención, está en Jesucristo, el Hijo de Dios.
(Génesis 1:26, 3: 1-7, Romanos 5:12-21)
4. La Salvación del Hombre
A. Condiciones para la Salvación

La gracia de Dios que trae salvación ha sido manifestada con todos los hombres por la predicación del arrepentimiento hacia Dios y fe hacia el Señor Jesucristo. El hombre es salvo por el lavacro de la regeneración y renovación del Espíritu Santo y siendo justificado por gracia y por fe, viene a ser heredero de Dios según la esperanza de la vida eterna. (Romanos 10:13-15, Lucas 24:47, Tito 3: 5-7)
B. Evidencias de la Salvación
La evidencia interna en el creyente de su salvación es el testimonio directo del Espíritu Santo (Romanos 8:16). La evidencia externa para todos los hombres es una vida de rectitud y verdadera santidad. (1 Pedro 1: 13-16)
5. El Bautismo en Agua
La ordenanza del Bautismo por inmersión en agua como un entierro con Cristo debe observarse como se manda en las Escrituras por todos los que realmente han aceptado a Cristo como su Salvador y Señor. Haciendo así, ellos han lavado el cuerpo en agua pura como símbolo de la purificación interna. Así ellos declaran al mundo que han muerto con Jesús y que también han sido lavados y resucitados con El, para andar en novedad de vida. (Mat. 28:19, Hechos 10:47-48)
6. La Cena del Señor
La Cena del Señor consiste en los elementos de pan sin levadura y fruto puro de la vid, es símbolo que expresa nuestra participación de la Divina Naturaleza de nuestro Señor Jesucristo (2 Pedro 1:4) un recuerdo de su pasión y muerte (1 Cor. 11:26) y una profecía de su Segunda Venida (1 Cor. 11:26) y esta ordenada a todos los creyentes hasta que El venga.
7. La Promesa del Padre
Todos los creyentes tienen el derecho a la Promesa del Padre, que es el Bautismo en el Espíritu Santo y Fuego según el mandamiento de nuestro Señor Jesucristo. Todos deben ardientemente esperarlo y ansiosamente buscarlo. Esta fue la experiencia normal de todos en la Iglesia Primitiva. Con esta viene la investidura de poder vivir y para servir los dones del Espíritu Santo de Dios y el empleo de ellos en la obra del Ministerio. (Lucas 24:49, Hechos 1:8)
8. La Evidencia en el Bautismo del Espíritu Santo
El Bautismo en el Espíritu Santo es atestiguado por la señal inicial y física del hablar en otras lenguas como el Espíritu Santo de Dios les daba que hablasen. (Hechos 2:4)
9. Santificación
Las Escrituras enseñan una vida de Santidad, sin la cual nadie vera al Señor. Con el poder del Espíritu Santo somos suficientes para obedecer el mandamiento, “Sed Santos porque Yo Soy Santo. (1 Pedro 1:16)
10. La Iglesia
La Iglesia es el cuerpo de Cristo, la habitación de Dios en el Espíritu Santo con el nombramiento divino, para el cumplimento de su Gran Comisión. Cada convertido nacido del Espíritu Santo, es parte integrante de la Asamblea General de Iglesias de los primogénitos, que están escritos en los cielos. (Efesios 1:22-23, Heb. 12:23)
11. El Ministerio y la Evangelización
Un ministerio divinamente llevado y bíblicamente ordenado ha sido provisto por nuestro Señor para un doble propósito:
Primero: La Evangelización del Mundo
Segundo: La Edificación del Cuerpo de Cristo, la Iglesia (Marcos 16: 15-20, Efesios 4: 11-13)
12. El Diezmo – Sostenimiento del Ministerio
A. El obrero es digno de su salario. (Mateo. 10:10)
B. Toda persona que sea aceptada como miembro quedara obligada a cumplir sus deberes religiosos y financieros.
C. Es deber sagrado aceptar el plan de Dios, que ha tenido desde el principio para el sostenimiento del ministerio. Las Escrituras dice: Abraham dio diezmos (Gen. 14:20), la ley demanda un diezmo (Lev. 27:30, Núm. 18:21, 26), los que no pagaban sus diezmos a Dios eran considerados como ladrones (Malaquías 3:7-14), los que anuncien el Evangelio, (1 Cor 9:7-14).
El deber del cristiano es traer a la casa de Dios sus diezmos según Dios lo ha prosperado.
Los diezmos serán usados únicamente para el sostenimiento del ministerio y la propagación del Evangelio.
13. Sanidad Divina
La liberación de enfermedades esta provista en propiciación y es el privilegio de todos los creyentes. (Santiago 5:14-15).
14. La Bendita Esperanza
Creemos en la inminente venida de Cristo para reunir su pueblo con El. Esto es la resurrección de los que han dormido con el Señor y el traslado de ellos con los vivos que sean de Cristo para encontrarse con su Señor en el aire. (Romanos 8:23, 1 Cor 15:51-52)
15. El Reino Milenario de Jesús
La Revelación de Jesucristo del Cielo, la Salvación de Israel como nación y el Reino Milenario de Cristo en la Tierra, es la promesa bíblica y la esperanza del mundo. (2 Tes. 1:7, Apocalipsis 20:1-7)
16. El Lago del Fuego
El diablo y sus ángeles, la bestia y el falso profeta y todos los que no están escritos en el Libro de la Vida, serán condenados a eterno castigo en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda. (Apocalipsis. 20:15)
17. El Cielo Nuevo y la Tierra Nueva
Nosotros conforme a su promesa esperamos Cielos Nuevos y Tierra Nueva en los cuales mora la Justicia. (2 Pedro 3:13)